Mi opinión sobre el Factor Quema Grasa

Como habrán visto, en el blog recomendamos el programa/sistema/libro “Factor Quema Grasa“, y en esta ocasión quería darles mi opinión sobre el producto, de forma que estén más informados si en algún momento desean seguirlo. En esta pequeña reseña cubriré los siguientes temas:

• Cómo adquirirlo
• Su efectividad
• Dificultades
• Alimentos
• Ejercicios
• Software

Lo primero que debemos mencionar es que, si bien existen distintas alternativas de pago y se ofrece material de forma gratuita, es un producto comercial. Existen personas que trabajaron por crear el libro, videos y software, y por eso no fomentamos su piratería. El “precio de lista” es de $97 dólares, con un descuento vigente que hace posible adquirirlo por $47, y alguna oferta eventual que en ocasiones permite algún descuento extra (si en cualquier momento marca menos de $47, no duden en adquirirlo a ese precio).

Por otra parte, aunque $47 pueda parecer un poco caro por un producto digital, si consideramos el beneficio que podemos obtener y lo que cuesta un mes de gimnasio o cualquier suplemento, el costo es mínimo, y de seguro podemos ahorrar en algo para compensar el gasto.

Lo segundo, y quizás lo más imporatante, es la efectividad del mismo. Sobre este punto puedo atestiguar que si se sigue de forma constante, intentando “hacer trampa” lo menos posible, uno puede bajar de peso de forma continua, relativamente rápida y sin el famoso “rebote”, ya que el sistema en si no consiste en dejar de comer 3 días sino en fomentar cambios permanentes en los hábitos alimenticios y en realizar actividad física. Si no están dispuestos a comprometerse con estos cambios, mejor no adquirir el sistema.

Sobre las dificultades, la parte más difícil pero quizás la más beneficiosa es “la desintoxicación”, que es la primera parte del programa (de 12 semanas) y donde pude notar también la mayor pérdida de peso en el menor tiempo, aunque durante las 12 semanas fue mucho mayor en total.

Esta fase consiste en una especie de “ayuno” en el cual sólo se consume una mezcla de agua purificada (de botella o filtrada), limón (se puede cambiar por lima, toronja o pomelo), miel de maple (se puede por syrup, jarabe de maíz, ágave, miel de palma o miel centrifugada y sin azúcar añadida) y pimienta cayena (un tipo de chile). El efecto es que se eliminan todos los residuos del colon y el hígado, y además se dispara un efecto inicial de quema de grasa ya que el cuerpo, al verse privado de su fuente habitual de calorías, comienza a quemar las existentes en las reservas de grasa del cuerpo, que es precisamente lo que deseamos lograr.

Superada esta fase, el resto del programa es bastante fácil de seguir, aunque quizás debamos hacer algunos cambios en la “lista de compras” y en las recetas que contiene el plan, dependiendo del país en que nos encontremos y en la época del año. Este es uno de los puntos más beneficiosos de contar con el programa original y no con la “copia pirata” ya que al tener el libro original contamos con 12 meses de soporte vía correo electrónico, donde podremos solicitar información personalizada de acuerdo a nuestras necesidades, y donde además te dan buenos consejos en el caso de que tengas dudas con el plan.

Sobre lo que se puede comer y no comer, no digamos que el programa en si es una revolución, ya que encontraremos recetas con un buen balance de proteínas, verduras y algunos carbohidratos, además de snacks saludables, en proporciones de acuerdo a nuestro peso, edad y nivel (hay varios niveles, de principiante a avanzado). Lo importante aquí es tratar de seguir el programa, ya que de otra forma estaremos desperdiciando nuestro tiempo y no será culpa del programa si no logramos nuestros objetivos.

Algunas de las conductas que propone el Factor Quema Grasa, es la ingesta de fibra y “comidas crudas” en todas nuestras comidas (como vegetales), ya que de esta forma mejoramos la digestión y prolongamos el tiempo de saciedad, ayudándonos a comer menos entre comidas.

También nos invita a no comer alimentos procesados o envasados, y sugiere alternativas saludables, ya que una buena parte de las razones por las que existe la obesidad es por las comidas procesadas, que además contienen aditivos, grasas hidrogenadas y en muchos casos azúcar añadida y sal en exceso. En general, es una buena guía para comer saludable, aunque en ocasiones requiere una segunda lectura y alguna consulta a su e-mail para tener claro la mejor forma de diseñar un buen plan de alimentación.

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En cuanto a los ejercicios, el programa es bien completo en este aspecto, y si bien no son obligatorios, se enfoca en acelerar las ganancias conseguidas con el plan de alimentación. Para esto, cuenta con una serie de videos y libros específicos para las necesidades específicas de cada persona. En el programa principal cuenta con 4 niveles de dificultad, y algunos ejercicios están enfocados a la utilización de máquinas, pero además cuentan con material para realizar ejercicios en casa, sin necesidad de máquinas de gimnasio. En lo personal partí con la rutina de principiantes y creo que no fue tan difícil como los ejercicios que te ponen en el gimnasio, y además compatibles con la rutina diaria de tener que realizarlos después de 8 horas de trabajo.

Un punto positivo es que en la sección de miembros del sitio cuentan con una serie de videos (donde aparece el mismísimo Dr. Charles), lo que nos permite entender mejor las rutinas, ya que un libro nunca muestra tan bien cómo se deben realizar los ejercicios.

Otro punto positivo es que cuenta con material para personas mayores, por lo que les permite a todos participar del programa y obtener sus beneficios.

Finalmente, quiero mencionar que en la sección de miembros también es posible acceder a distintos software, los cuales, si bien no son tan necesarios, son un buen complemento al valor general obtenido en el programa. Entre ellos está un generador de dietas, que es un buen punto de partida si no sabemos cómo comenzar. También incluye una aplicación que nos permite medir nuestro avance, que también es algo sencillo pero nunca está de más, y un software llamado “NutriSoft”, que no lo entendí mucho pero creo que no lo necesité después de todo, ya que me enfoqué en el plan de alimentación y los ejercicios.

En resumen, es un buen programa, por eso lo recomendamos, pero sólo para quienes quieran comprometerse con cambios permanentes en su calidad de vida y estén dispuestos a mejorarla y descubrir que no todo es comida chatarra y alimentos envasados.